La especie que sobrevive es la que mejor se adapta y se ajusta al entorno cambiante en el que se encuentra, ya lo decía Darwin; y su teoría, muy vigente, inspira las ideas de negocio más innovadoras en el sector legal. De hecho, la forma en que las empresas se adapten a cambios fuera de su control puede resultar muy reveladora de su éxito futuro.
La profesión jurídica es notoriamente lenta para aceptar el cambio. Sus practicantes reacios al riesgo, protegidos por capas de regulación, frecuentemente examinan de forma meticulosa los precedentes y el trabajo de casos.
Pero, ya antes de la pandemia, las firmas de abogados se enfrentaban a retos sin precedentes que exigían su rápida atención y adaptación:
En todos los niveles, el problema es que las empresas no están orientadas hacia las soluciones, y ello les ha llevado a tardar en comprender la importancia de los avances y capacidades tecnológicas. A una forma de trabajar eminentemente teórica, se suma el problema de la brecha generacional.
En el estudio, los socios que están cerca de la jubilación pueden pensar que el status quo está bien, lo que crea el problema de que las personas con más autoridad para impulsar el cambio pueden estar entre las más improbables de fomentarlo.
En general, los abogados más jóvenes aceptan más que la profesión está cambiando y que es preciso continuar explorando nuevas tecnologías que puedan integrarse en sus firmas para enfrentar nuevos desafíos competitivos.
Gran parte de la presión para adoptar la tecnología hoy proviene de:
Para enfrentarse a estos desafíos, es de vital importancia que las firmas de abogados de hoy obtengan el máximo valor de la implementación de eficiencias tecnológicas. Esto se puede lograr centrándose en áreas donde es probable que las soluciones elegidas tengan un impacto significativo.
Las firmas de abogados deben considerar redoblar sus esfuerzos para asegurarse de aprovechar los beneficios que ofrece la innovación de servicios (como la automatización y otros avances tecnológicos) para adaptarse a los nuevos tiempos de pandemia y asegurarse de que dichas innovaciones no concedan una ventaja competitiva significativa a los competidores recién llegados y a los crecientes departamentos legales corporativos internos.
El ritmo acelerado de la transformación tecnológica en el campo legal ha creado un cambio significativo en la forma de hacer negocios, y las firmas de abogados ciertamente se han dado cuenta. Según una reciente encuesta, “la gran mayoría de los líderes de los estudios de abogados cree ahora que una mayor competencia de precios, la mercantilización del trabajo legal, las tecnologías inteligentes y los nuevos tipos de competencia, son una parte permanente del panorama legal”.
La rápida adaptación al cambio es fundamental para el éxito sostenido. Eso se ilustra con las acciones que los líderes de las firmas de abogados están tomando ahora, especialmente en los últimos meses, para alinear los precios, la eficiencia y la cantidad de personal con las expectativas del cliente:
Entre las ideas de negocio que las firmas de abogados pueden adoptar para mejorar sus modelos, se encuentran las siguientes:
La transformación digital es clave para la supervivencia de las firmas jurídicas, tanto en lo que respecta a la eficacia de sus procesos internos, como a sus relaciones e imagen proyectada al exterior.
La famosa teoría de Charles Darwin sobre la evolución no solo se aplica a la naturaleza, sino también a las ideas de negocio en la industria legal. La tecnología es hoy el facilitador que hace posible la adaptación de las firmas de abogados a su entorno y permite su ajuste al ecosistema cambiante en el que se encuentran.¿Buscas mejores resultados empresariales a largo plazo?