Entender el derecho tecnológico o informático implica aceptar que el mundo se está transformando al ritmo en que aparecen nuevos e importantes avances tecnológicos en una variedad de campos, como la tecnología de las comunicaciones de información, la inteligencia artificial, la nanotecnología, la tecnología espacial, la biotecnología o la computación cuántica, entre otros.
Estas se tratan de innovaciones altamente disruptivas y capaces de producir cambios transformadores importantes en el funcionamiento de las sociedades. Avances muy diferentes, pero con un elemento común: que se centran en la recopilación, el procesamiento y el análisis de enormes cantidades de datos, dando origen a lo que conocemos como justicia digital.
El derecho tecnológico o informático es una especialidad que abarca todos los marcos jurídicos relacionados con la transferencia, uso y almacenamiento de información en formato electrónico. Por tanto, involucra cualquier ley que tenga que ver, de una u otra forma, con ordenadores y otros dispositivos electrónicos que sirvan para almacenar información.
Por lo tanto, los diferentes tipos de derecho informático incluyen una amplia gama de aspectos, que van desde la seguridad, hasta los derechos de privacidad o la propiedad intelectual.
En este sentido, como rama jurídica, el derecho tecnológico (o derecho de la informática) se ha consolidado como una nueva especialidad jurídica que era inexistente hasta la aparición del internet y que ha venido tomando cada vez más relevancia gracias al auge de todo el ecosistema digital que vemos hoy en día:
El derecho tecnológico o informático es importante porque tiene como objetivo regular y proteger los derechos individuales, garantizar la seguridad y privacidad en línea, fomentar la innovación y regular el mercado de las empresas tecnológicas.
En este sentido, la importancia del derecho informático radica en que proporciona un marco legal para abordar problemas emergentes en la era digital, como la privacidad, la seguridad cibernética, la propiedad intelectual en línea, la responsabilidad de los proveedores de servicios en línea, la neutralidad de la red y la regulación de las redes sociales.
Además, el derecho tecnológico promueve la competencia y previene prácticas monopolísticas o anticompetitivas en el mercado de las tecnologías, lo que a su vez fomenta la innovación y la inversión en investigación y desarrollo.
Entre las principales características del derecho tecnológico o informático se encuentran las siguientes:
Para hablar sobre la clasificación de derecho informático hay que tener en cuenta que, como se dijo anteriormente, esta área legal todavía no está formalmente considerada como una especialidad jurídica autónoma e independiente de las demás ramas. Por tanto, no existe de manera específica una clasificación definida, a pesar de que ya se han ido extendiendo los principios del derecho informático.
Sin embargo, lo que sí debemos entender es que esta área legal pertenece a una categoría llamada iuscibernética, cuyo término proviene de la combinación de “jurisprudencia y medición”, y hace referencia al estudio de la aplicación de la estadística en el derecho.
Así, por su parte, la iuscibernética está compuesta por las siguientes áreas:
La diferencia entre derecho informático y la informática jurídica es que esta última se refiere no a una especialidad del derecho, sino más bien a la implementación de tecnología informática dentro del campo legal, a lo cual se le conoce como legaltech.
En este sentido, el objetivo de la informática jurídica es aportarle a todos los players del sector una gran variedad de herramientas digitales con las cuales puedan optimizar el desarrollo de sus actividades. Por ejemplo, hay programas legaltech especializados en automatizar la facturación electrónica dentro de las firmas de abogados.
Algunos ejemplos de derecho informático por áreas de aplicación son:
Ya vimos algunos ejemplos del derecho informático, pero más allá de la especialidad jurídica como tal, también es conveniente hablar sobre la implementación de la tecnología dentro del derecho.
La informática en el derecho se relaciona con las tecnologías que son aplicables al sector legal (legaltech), un caso muy similar a los software especialmente diseñados para aumentar la productividad y rentabilidad de las firmas de abogados de diferentes maneras.
En este contexto, podemos mencionar dos herramientas digitales que se han estado implementando de forma masiva por las firmas de América Latina: TimeBillingX y CaseTracking.
Desde cualquier perspectiva en que se analice, el derecho tecnológico o informático es un salto evolutivo del sector legal. Por este motivo, es necesario que las firmas de abogados y todos los demás players jurídicos se adapten a este nuevo ecosistema que combina lo mejor de dos mundos, del tecnológico y del judicial.
¿Qué es el derecho tecnológico?
El derecho tecnológico o informático es el marco jurídico que regula la protección, el uso, acceso y resguardo de cualquier tipo de dato electrónico e información digital.
¿Qué es derecho informático en informática?
El derecho informático en informática se refiere a la aplicación y el desarrollo de los establecimientos jurídicos en todas aquellas áreas, procesos y sectores donde actúan las tecnologías informáticas.
¿Cuál es la importancia del derecho informático?
La importancia del derecho tecnológico o informático se basa en la necesidad de implementar la justicia en todo lo relacionado con medios electrónicos.
¿Cuál es un ejemplo de derecho informático?
Un ejemplo de derecho informático es el de la protección de datos de los usuarios que se registran en las páginas web.
¿Dónde se aplica el derecho informático?
El derecho tecnológico o informático se aplica transversalmente a todas las demás áreas del derecho que se puedan relacionar con el uso de medios informáticos.
El derecho tecnológico, pudiendo hacer referencia al derecho informático o al uso de nuevas tecnologías en la gestión legal, es un tema cada vez más relevante tanto para las firmas de abogados como para las empresas de cualquier tipo con presencia online. De aquí la importancia de conocer las posibles definiciones, las áreas de acción y las herramientas digitales.
Publicado originalmente el 11 de febrero de 2020 y actualizado el 29 de mayo de 2023